Jueves, 6 de febrero de 2025, 17:36 UTC3 minutos

El gobernador acude a Querétaro con la presidenta Shienbaum por el 108 aniversario de la Constitución. Foto Especial.

El pueblo pone, y, ¿el pueblo quita?

La revocación de mandato es un tema que vuelve a surgir, pero, ¿es una posibilidad o un espejismo?

Culiacán, Sin. – La discusión surge de nuevo. ¿Es posible remover a Rubén Rocha Moya como gobernador del estado? No, no es posible. Al menos no a través de procesos legales. Nada más laberíntico que advertir esa probabilidad como asequible, a la mano. En noviembre del año pasado eso debió quedar zanjado, pero el argumento de que vivimos en una democracia alimenta la posibilidad, aunque esta lleve invariablemente a un callejón sin salida.

El gobernador estuvo en Querétaro. Finalmente logró su foto con Claudia Sheinbaum, aunque esta haya sido “en bola”. Nada que un buen zoom no resuelva. Y ahí surgió otra vez la cuestión. Ante las preguntas de medios, Rocha respondió. “Yo inicié una nueva ley para tal efecto y ahí está”.

Se refiere a la revocación de mandato. Insistió. El pueblo pone y el pueblo quita. Nada más alejado de la realidad. El 13 de noviembre de 2024 el Instituto Electoral del Estado de Sinaloa (IEES) resolvió “que no es procedente el inicio del instrumento de participación ciudadana de revocación de mandato solicitado en tres peticiones diversas, en relación con el titular del Poder Ejecutivo del Estado de Sinaloa”.

La explicación es ociosa, pero va de nuevo. El Consejo General del IEES, en un comunicado explica que “en estricto apego a la garantía de seguridad jurídica tutelada por el artículo 14 constitucional, la jurisprudencia emitida por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), así como en el criterio sostenido por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que establecen que a ninguna ley se le dará efecto retroactivo en perjuicio de persona alguna”. Dicho en otras palabras, la Ley no se le puede aplicar al gobernador porque ya era gobernador cuando esta se promulgó.

Esto dio origen a campañas ciudadanas y también algunas partidistas. Una muy interesante es la surgida desde change.org en la que advierten que en 2022 el entonces presidente López Obrador fue sometido a este proceso por voluntad propia.

Y añaden:

“El poder no puede quedar blindado ante el escrutinio popular solo porque una ley se aprobó después de que alguien asumió el cargo. La soberanía reside en el pueblo, y es el pueblo quien debe decidir si un gobierno sigue o se va”.

Suena lógico. Pero la ley es la ley y aunque esto suena ocioso, es una verdad. Rocha fue electo el 6 de junio de 2021 y la ley de revocación de mandato en Sinaloa fue publicada en el periódico oficial el 17 de junio de 2022, poco más de un año más tarde.

Y hoy el secretario general de gobierno redundó en el tema, pero lo aterriza en un simple y llano “es inviable”.

“Y efectivamente, el IEES ha determinado que ahorita es inviable legalmente aplicar el procedimiento”.

Por lo tanto, todo lo dicho por el gobernador ayer en Querétaro es ocioso. Nada más alejado de la realidad que los dichos del pueblo pone y el pueblo quita. Eso no es así en su caso. La ley lo protege.

El pueblo pone, el pueblo quita. Lo repiten una y otra vez. Es una suerte de mantra. Pero es un callejón sin salida.

PD. No pienso que con su salida se solucione el problema de violencia, pero sí estoy seguro de que significaría una victoria moral sin precedentes para el pueblo y la democracia que a través de algún mecanismo se lograra la destitución en el cargo, le quitaran el fuero y lo sometieran a un proceso político y penal.

 

profilePhoto

Aarón Ibarra

Reportero Independiente de tiempo completo

Relacionado
Mas leído
Nuevo